El profesor e investigador Gustavo Tapia reseña los orígenes, desarrollo, esplendor y ocaso del último campamento minero fundado el 18 de mayo de 1915, que tenía como función principal albergar a los jefes, trabajadores y obreros con los equipamientos básicos, que rápidamente se fue equipando y llegó a tener unos 25.000 habitantes.
La actividad es organizada por el Centro de Centro Investigación Histórico Cultural Isaac Arce Ramírez.