La muestra se inaugura con un conversatorio este miércoles 19 de octubre a las 18:00 horas, en el auditorio del museo.
"Durante el tiempo que he pasado en Antofagasta aprendí mucho de las formas de mostrar amor. Puedo estar acompañada, callada, sin entender las conversaciones y todavía expresando emociones. Estar sin palabras me permite observar la forma de ser, la forma de hablar. No entiendo palabras, entiendo gestos. Los gestos de ser mujer o ser hombre son aprendidos, son repetidos por cada cultura. Observo los gestos y los reproduzco en el arte.
Amar a uno mismo, amar a otre, querer a uno mismo y querer a otres. Amar es universal. El medioambiente y el tiempo cambian, el amor no desaparece.
La mujer pasiva toma un rol activo y deja de ser admirada solo por su belleza. Venus y Eros entre otres dioses de amor me han inspirado mucho, y aparecen en varias obras mías con diversos contextos y esencias.
Mi pintura es expresiva, y lo más importante en mi arte es el juego entre la obra y yo. Compuesta por pequeños detalles sensibles actúa mi estilo de pintar; salvaje y libre. Hay algo que me atrae de pintar el cuerpo humano. Vuelvo a la carnalidad y a la piel repetidamente. El contacto de piel con piel, se traduce en un momento mágico", manifiesta la artista visual Nina Korvenoja, Licenciada en Bellas Artes de la Universidad Turkuamk, Finlandia, miembro de la Asociación de Artistas de Salo.
Arriba a Antofagasta en noviembre de 2021 como becaria del Ministerio de Educación de Finlandia para trabajar como pintora y artista visual en la Estación Fotógrafo de Cerros. Ha participado en exhibiciones en Finlandia, Rusia y Nepal. Sus obras han sido adquiridas por coleccionistas públicos y privados.
Durante el 2022 ha organizado y coordinado varios talleres en el campamento Altamira de la capital regional, donde también, junto a Misa Saraste, trabajaron en la obra comunitaria Aves Migratorias. Con Misa, en Finlandia, realizó obras de arte visual de temática medioambiental, performances, videos y exhibiciones.